Buque de carga

Empresas japonesas de transporte marítimo así como constructoras navales aúnan esfuerzos para conseguir hacer que los barcos autónomos sean  una realidad en 2025, buscando, entre otras cosas, reducir radicalmente los accidentes ocurridos en alta mar.

Mitsui O.S.K Lines o Nippon Yusen entre otras, compartirán experiencias y dividirán costos en el desarrollo de esta tecnología que podría suponer varios cientos de millones de dólares.

Estos buques usarán un sistema de dirección basado en inteligencia artificial que usará tecnologías como Internet de las Cosas para trabajar con datos sobre posibles obstáculos o el tiempo en el mar, usando estos datos para generar rutas más seguras  y económicas. Así mismo, estos barcos podrán predecir fallos y funcionarán sin tener abordo nada de tripulación, tratando de reducir el número de accidentes marítimos a la mitad.

Nippon Yusen actualmente investiga la tecnología que permita a los buques manejar datos para evaluar riesgos de colisión, por otro lado Japan Marine trabaja en un sistema que permita predecir averías antes de que sucedan.

El Ministerio de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo japonés apoya esta iniciativa, creando una cooperación entre los sectores público y privado intentando propulsar el desarrollo y posicionar la tecnología japonesa como estándar internacional.