El inventor del bolígrafo Ladislao Biro, nació en Budapest el 29 de septiembre de 1899. Este periodista de origen húngaro, no sólo inventó el bolígrafo, sino que tiene en su haber 32 inventos más entre los que podemos destacar: una máquina para lavar ropa, un sistema de cambios de marchas para automóviles, un vehículo electromagnético, un termógrafo clínico, etc., pero fue el bolígrafo el más popular de todos sus inventos y el que le dio fama internacional.
Siendo periodista, Biro estaba cansado de que la pluma, en demasiadas ocasiones, se le atascara a mitad de un reportaje y de los borrones de tinta que se generaban, así que con la ayuda de su hermano Georg que era químico, logró una tinta muy útil para la escritura a mano, pero que no se podía utilizar con la pluma porque se trababa al escribir.
Pero viendo a unos niños jugando en el parque, fué cuando tuvo la idea que dio pie al bolígrafo tal cual lo conocemos hoy.
Había un grupo de niños jugando con canicas que atravesaban un charco y observó el trazo que dejaba la esfera cuando salía del agua. Fue a partir de esta idea que empezó a trabajar en la bola como eje conductor de la tinta en el bolígrafo.
Ladislao Biro patentó un prototipo en Hungría y Francia, en 1938, pero no lo llegó a comercializar.
Ese mismo año, el ex presidente de Argentina Agustín Pedro, quien vió a Biro tomar notas con su prototipo de bolígrafo en una rueda de prensa, se interesó por tan práctico instrumento de escritura y le propuso que se instalase en Argentina.
Biro de origen judío, se trasladó a Buenos Aires en mayo de 1940, al comenzó la Segunda Guerra Mundial, huyendo de la persecución nazi. En ese mismo año formó la compañía Biro Meyne Biro y en un garaje con 40 operarios y un presupuesto muy bajo, perfeccionó su invento, realizando una nueva patente en Buenos Aires en 1943.
Este nuevo producto se lanzó al mercado bajo el nombre comercial de Birome y se empezó a comercializar a un precio de entre 80 y 100 dólares. Un coste excesivo para la época. Al principio los libreros consideraron que esos lápices de tinta eran demasiado baratos como para venderlos como herramienta de trabajo, así que los comercilaizaron como juguetes. En la actualidad existen infinidad de tipos y modelos de bolígrafo al alcance de todas las personas.
Un ejemplo de la popularización del boligrafo en Japón es Masaki Yamato Pencil Co Ltd, hoy conocida como Mitsubishi Pencil Co, basada en Tokio, que en 1979 creó el primer bolígrafo uni-ball rollerball. Su calidadad y rendimiento en la escritura lo convirtieron en un éxito inmediato en Japón y América.
Tras 15 años de desarrollo de esta tecnología, en 1994, creó el sistema de escritura rollerball uni-ball por el que hoy en día es reconocida. Desde entonces, su popularidad se ha ido incrementando, convirtiéndo uni-ball en una de las marcas de bolígrafos más populares del mundo.
Presente en más de 100 países, sus innovaciones recientes incluyen el bolígrafo de tinta Signo TSI Erasable, que está disponible en una amplia gama de colores y que permite borrar y corregir errores fácilmente. Además, el Uni-ball Air que representa la última generación de bolígrafos y la evolución de la escritura, dispone de una punta flexible que se adapta a cada estilo de escritura, haciéndola suave y fluida.
Más información en: http://www.uni-ball.es/
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